sábado, 16 de julio de 2011

Namsham

A las 9.00 hemos cogido un jeep dirección Namshan, es nuestro próximo destino. El trayecto ha durado seis horas y el pecio ha sido de 5.000 MMK. Hemos ido muy apretados pero las vistas han sido muy bonitas, todo montañas, rio, naturaleza, etc.
Al llegar a Namshan nos han dejado delante de la única guest house del pueblo, creo que es la más sucia y asquerosa que he estado en todo el viaje. En ella nos esperaba un guía que nos habían recomendado, “Momo”. Nos ha acompañado a comer y nos ha dado una noticia, algo diferente a lo que esperábamos. Nos ha informado que no podíamos llevar a cabo el trekking de tres días ya que en las montañas estaban los militares y no hacían muy buenas migas con el gobierno actual y no se atrevía a llevarnos por ellas por si pasaba algo y si había enfrentamientos y nosotros nos encontrábamos por en medio y nos pasaba algo…
Por lo tanto se nos ha quitado la idea del pedazo de trekking de tres días y nos conformamos con una excursión de un día en un poblado que dice que nunca ha ido ningún turista antes, aunque lo dudo un poco. Hemos bajado y subido montañas, nos ha llovido a contaros y nos hemos quedado mojados de cabeza a pies. Cuando hemos llegado al poblado nos han atendido en una casa, nos han dado ropa seca, han encendido un fuego, han sacado te, biscuits y también una ensalada hecha de te fresco, ajo y cacahuete, muy salada!! Pero muy rica!! Han sacado los vestidos tradicionales y han vestido a Laura y Jaume y nos hemos estado sacando fotos, hemos estado hablando de la vida en el poblado…
Por la noche nuestro guía nos ha invitado a cenar a su casa, un detalle muy amable por su parte. Había mucho arroz, papas chips hechas por ellos, tofu marinado, patatas rebozadas, zanahoria con cebolla, etc. todo muy bueno.
Aquí en Namsham la gente es muy diferente al resto de Asia, la gente  que nos ve por la calle se queda alucinada, en el pueblo hay 10.000 habitantes, no sé si creérmelo, y antes que llegáramos ya sabían que venían 6 extranjeros. Todos son muy curiosos, nos miran, sonríen, saludan, hablan entre ellos, muchos no saben inglés y no se atreven a decirnos nada. Un muchacho nos ha invitado a te por la tarde en la te shop, una mujer ha arreglado el zapato de Luis gratis y le ha invitado a comer noodles a su casa… es un concepto muy diferente al resto de Asia, yo creo que para la gente de aquí es todo un honor tenernos entre ellos y para el resto de Asia somos un $ con piernas y van a sacarnos todo lo que pueden.






No hay comentarios:

Publicar un comentario